Casa Rural La Comendadora. Antigua casona Palacio desde la que se administraba la Encomienda de Sancti-Spiritu, de la antigua Orden Militar de Santiago, edificado en 1736 como reza en la inscripción de la fachada, donde respetándose la madera y la estructura original se ha rehabilitando como alojamiento rural. La casa Rural se encuentra situada en Casar de Palomero al norte de Extremadura, al Sur de la comarca de las Hurdes, en una bella zona con plantaciones de olivares y cerezos, con hermosas vistas de sus sierras desde el pico de la Sierra de Altamira. Casar de Palomero ha sido poblado desde el Neolítico, encontrándose restos de cultura árabe y cristiana tras la reconquista por el Reino de León . Poseía una fortaleza en el Pico de Santa Barbara . En el año 1274, Casar de Palomero, pasa a depender directamente del monasterio del Sancti-Spiritu de Salamanca como una de sus posesiones mas importantes, sede de la encomienda. Este acogedor alojamiento rural en tres plantas está situado en la calle Mayor, en el centro del pueblo. Está preparado tanto para visitantes ocasionales como para estancias familiares largas. Disponible para su uso por habitaciones, por plantas o completa. Casa Rural La Comendadora consta de: Tres grandes salones comedores. Cuatro habitaciones dobles. Cuatro habitaciones sencillas. Cuatro baños completos con decoraciones diferentes . Algunos de ellos con Hidromasaje Más de 2000 metros de Jardín con zona de barbacoa, lugares de juegos para niños Cocina completa. Incluye calefacción, televisión… Alrededor del patio con su fuente y en los jardines, antiguas huertas, se ubican las zonas de descanso y recreo de niños y padres. En la planta baja, toda con vigas originales de madera de castaño, las bodegas de vino y aceite así como las cuadras de animales han sido transformados en despacho de recepción, salón, y bodegas conservandose las antiguas paredes de piedra y mampostería. Por la escalera principal de granito se accede a la primera planta, también con vigas de castaño original, que contiene cinco amplios dormitorios con capacidad para 8 personas, dos salones, dos baños, uno con hidromasaje y cocina completamente equipada, que da salida a un amplio patio alrededor de una fuente y las huertas de labor ahora con frutales y dedicadas al ocio con zonas de juegos, barbacoa A través de su escalera independientes se accede a la segunda planta, antiguo “sobrao” de almacenamiento y conservación de productos agrícolas (txt.RGest). Se ha procedido a su recuperación para ubicar tres cómodos dormitorios con capacidad para 5 personas, dos amplios baños y un gran salón con zonas de estar, comedor y office.Puntos de Interés: Calles de Barrio Judío, Árabe y el Cristiano. Iglesia Parroquial DEL Espíritu Santo (S XV) en el lugar ocupado por una antigua mezquita árabe. Basílica de la Cruz Bendita (S XVII-XVIII) en el lugar de la sinagoga judía. Petroglifo de la Piedra de la Rueca. Museo del Olivo. Rio de los Ángeles. Atractivos: Rutas de Senderismo: Ruta Pico de Altamira, Ruta de los lagares, Ruta de las Corzas, Ruta Arrocerezo, Ruta de la Maquina, Ruta de la Pesquera, Ruta del Rey Alfonso XIII por las Hurdes. LISTA DE PRECIOS: Casa Completa: 300 Euros. Habitación Dobles: 50 Euros. Habitación Sencilla: 40 Euros. DIRECCION: Casa Rural La Comendadora C/ Mayor nº 12 Casar de Palomero Cáceres Teléfonos de Contactos: 927 43 60 48/ 670 03 09 99 / 670 03 09 53.Huella imborrable de tres culturas Esta localidad, que tiene el título de Villa, se distingue por la coincidencia de tres culturas históricas que han dado lugar a tres barrios distintos: el judío, el musulmán y el cristiano. Este es un pueblo de bella arquitectura en el que se dan cita el adobe, la madera y la serrana pizarra, rodeado de un atractivo paisaje determinado por las sierras de Santa Bárbara y Castillejos y flanqueada por el río de los Ángeles. Ha sido poblada desde el Neolítico, encontrándose restos de esta época y de culturas posteriores. Poseía una fortaleza denominada Palumbaria que se alzaba en lo más alto del pico de Altamira. Existe documento medieval, acta y testimonio del derribo de la fortaleza de fecha 14 de agosto de 1489, a instancias de Mayor Coello, comendadora del monasterio de Sancti Spíritus de Salamanca, en virtud de la carta-orden dada previamente por el duque de Alba. En el año 1274 pasa a depender directamente del monasterio de Sancti Spíritus de Salamanca como una de las posesiones más importante de la encomienda. Es un pueblo esta rodeado de un atractivo paisaje de olivares y cerezos y hermosas vistas desde Santa Barbara.QUÉ VISITARLa Iglesia Parroquial del Espíritu Santo (s. XV), que según la leyenda en este lugar hubo una pequeña mezquita musulmana. La Ermita de la Cruz Bendita (s. XVII-XVIII, en este lugar hubo una sinagoga judía y una pequeña ermita). La Ermita del Puerto del Gamo, la Ermita del Santo Cordero y las ruinas del antiguo convento de San Marcos. Debe verse un Petroglifo de la Piedra de La Rueca en el olivar de la Varistuela y podemos dar un paseo por las calles estrechas del Barrio Judío, por el Árabe y el Cristiano, contemplando las distintas construcciones, calles que tienen diferenciados sus tres antiguos barrios, en sus rótulos, con las marcas de la estrella de David las calles del Judío, la media luna las calles del Árabe y con una cruz el antiguo barrio cristiano.QUÉ MÁS HACERCasar de Palomero es un municipio con gran tradición culinaria, y en él el viajero puede degustar la exquisita caldereta de cabrito, los rebujones, las patatas meneadas, los socochones, los pinchos de morcilla fresca y el matajambre, para terminar con un postre compuesto por los numerosos dulces típicos como las perrunillas, las floretas. Para llevarse de recuerdo del lugar son ideales las cerezas, el aceite y las aceitunas, así como los dulces típicos como los huesillos y mantecados, las ciruelas, los higos y además, frutas. No podemos olvidarnos del vino de pitarra y podremos conocer los excelentes trabajos que realizan un maestro artesano en forja y una asociación de mujeres que elaboran magníficos bordados. Esta localidad tiene todo para dejar una huella imborrable en la retina del viajero.