La “Casa da Feira” es la típica casa grande de los pueblos de montaña del sur de Galicia, que tiene en su construcción los materiales nobles de la región . Fué construida en el año 1874, en la Quinta de San Martiño, lejos de la casa principal, pero al lado de la explanada de la feria, que le dió nombre . Esta feria se celebraba mensualmente, cada día 24 . En la misma época, fue edificada la Casa del Aceite, donde se conservó un molino y un lagar de aceite hasta mediados del siglo XX. Consta que esta casa fué abrigo de familias pobres que pagaban su estadía y sustento con trabajos en la quinta, donde se producía sobre todo, aceite, maíz y vino.Después de algunas décadas en ruinas, fué reconstruida entre los años (2007 - 2009) y transformada en una casa de turismo rural, con restaurante y centro de ocio.Su localización, a un kilómetro escaso de la capitalidad de Lobios, con vistas a la Sierra del Xurés, es un excelente punto de partida, para, en cualquier dirección, encontrar motivos de interés – al norte la montaña de Entrimo, al este las interesantísimas aldeas de A Regada, Sampaio, A Cela, etc,; al sur lo mejor del Parque Transfronterizo, (Baixa Limia y el Parque Nacional Peneda Geres), y al Oeste las aldeas de Manín, o Compostela, hasta la histórica aldea de Lindoso, ya en territorio portugués.Venga a ver nuestras propuestas para disfrutar de lo mejor del Xurés - Gerês.Aquí, lo único que no faltan son motivos.La Casa da Feira y su equipo les esperan.(txt.RGest)El mayor atractivo de esta zona fronteriza, es sin duda, la presencia del PARQUE NATURAL BAIXA LIMIA - SIERRA DEL XURES, que junto con el PARQUE NACIONAL PENEDA - GERES, conforman uno de los espacios naturales protegidos más emblemáticos y excétricos. Recientemente declarado RESEVA DE LA BIOSFERA Transfronteriza GÊRES - XURÉS, como reconocimiento a un ejemplo de superviviencia desde el equilibrio entre la actividad humana y el medio natural. Esta situación posibilitó, hasta el día de hoy, la manutención de un patrimonio cultural y natural de un valor excepcional y único.Facilmente se encuentran todavía vestigios megalíticos, celtas, romanos y naturalmente medievales, atestando un antiguo y organizado uso de espacio, sirviendo por veces y desde tiempos inmemoriables de referencia geográfica o de límite de las comunidades. Rico en paisajes, las características de las montañas del noroeste de la penínsual Ibérica, que combinan el granito rocoso en las altas montañas, y profundos valles cubiertos de un verde exhuberante. El agua, elemento protagonista de la zona, desde las aguas termales aprovechadas desde los tiempos de los Romanos, que dejaron su legado en forma de campamentos, hasta las cristalinas aguas de los ríos de montaña, que forman innumerables cascadas que dibujan paisajes inéditos en el alma.Pero la riqueza de esta zona, es preciso fotografiarla y memorizarla en la retina, en una vista que resulta imprescindible para sentir la magia de su historia, cargada de leyendas que deben ser escuchadas y sentidas.