5 razones por las que visitar Córdoba en verano
5 razones por las que visitar Córdoba en verano
¿En verano? ¿Estamos locos?
No, nos hemos vuelto locos, y si leéis todas las razones es muy probable que te convenzas para ir o se lo plantees a algún amigo/a, pareja o familiar.
1. Temporada “baja”
Los meses más potentes para visitar Córdoba son los de primavera. Justo hace 2 meses Córdoba lucía sus mejores galas con sus patios llenos de flores, macetas y plantas. Además los habitantes de su ciudad podían celebrar su feria, dicen que el mes de mayo es el mes de Córdoba.
Por todo esto, si queréis visitar Córdoba en verano no os encontrareis con aglomeraciones de gente y encontrareis precios muy asequibles.
2. Gastronomía
Con estos calores ¿a quién no le apetece un buen plato fresquito? .Si hablamos de Córdoba, debemos y tenemos que hablar de uno de sus fuertes: el salmorejo. Este plato tan veraniego es una de las opciones más elegidas a la hora de comer en nuestras casas en la época estival.
Podemos disfrutar del turismo monumental de la ciudad, pero no nos olvidemos del gastronómico: salmorejo, flamenquines, rabo de toro…y para picotear, sus aceitunas, que por cierto, ¡se las comen como pipas!.
3. Monumentos
Ir a Córdoba y no visitar su Mezquita es como ir a París y no ver la Torre Eiffel. Son muchos los monumentos que se pueden visitar en Córdoba: La Mezquita, el Puente Romano (dónde por cierto, se rodó una escena en la famosa serie “Juego de Tronos”), el Alcázar de los Reyes Cristianos…etc.
Un consejo: en las horas de más calor os recomendamos que visitéis la Mezquita, dentro hay una temperatura agradable.
4. Sus calles
¿Te gusta la fotografía? ¿Quieres pintar un cuadro y no tienes inspiración?. Córdoba es única, es una mezcla entre árabe y cristiana, y perderse por sus calles debería ser una obligación de todo buen turista. Las calles del casco antiguo de Córdoba podrían ser perfectamente musas de inspiración para cualquier artista. Es raro, por ejemplo, no encontrarse un turista fotografiando las paredes, las puertas, los arcos, las macetas, las flores…de cualquier calle del centro. Además la luz del verano le da un toque especial.
5. Su gente
Esta ciudad, además de presumir ser declarada Patrimonio de la Humanidad, puede presumir de la amabilidad y sonrisas de su gente. Los cordobeses hacen que los turistas se sientan como en casa. Ellos, como los sevillanos o malagueños, viven mucho del turismo así que es muy agradable estar en una terraza y que te atiendan con la mejor de las sonrisas, eso sí, no les compares con los sevillanos (un “pique” que tienen entre ellos como el que tienen pacenses y emeritenses, o valencianos y catalanes).
En fin, queridos lectores, os animamos a que perdáis el miedo al calor, cojáis el coche, tren o medio de transporte que prefiráis y os sumerjáis en la ciudad de Séneca, Averroes y Maimónides.
PD: Tomaos un salmorejo fresquito a la salud de Ruralzoom ;).
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